El estudio del torrente sanguíneo es muy valioso para determinar si las personas están propensas a sufrir enfermedades derivadas a la sangre, como la leucemia, neutropenia y otras más. En esta oportunidad se hablará de los hematíes altos, o un nivel exacerbado de glóbulos rojos en el organismo.
Mediante la eritrocitosis, que es un examen médico, el sujeto asegurará que los valores estén normales. Si no lo están, tomar las medidas correspondientes hasta seguir el tratamiento adecuado. El conteo de los glóbulos rojos queda expresado en millones por microlitro (millones/µl).
También es posible hablar de la policitemia, siendo un caso más complejo que la misma eritrocitosis, gracias al aumento de los glóbulos rojos, blancos y plaquetas. Con una hematología completa, el individuo sabrá con precisión cuál es la tasa más alta de estos componentes, para proceder al tratamiento y así recuperar los números estándar.
¿Qué significan los hematíes altos?
Cada vez que alguien lee la frase “hematíes altos” en un análisis de laboratorio o cuando realiza la hematología clásica, quiere decir que los glóbulos rojos están muy pronunciados en la sangre. Un hecho que tiene consecuencias si no hay aplicación de acciones correspondientes.
Hay que tomar como referente algunas cifras que cambian en relación al género. Si los hematíes altos en hombres está por encima de los 5.9 millones de glóbulos rojos y en mujeres, que supere la barrera de los 5.5 millones, quiere decir que son pacientes casi seguros de la policitemia o eritrocitosis. La hemoglobina alta es otra consecuencia por presentar demasiados glóbulos en la sangre.
Causas
El hecho que los glóbulos rojos estén en un número tan elevado, puede variar en cada persona. Hay sujetos que padecen este mal como parte de una patología congénita y otro grupo por presentar una complicación momentánea en su salud. Dicho esto, algunas causas frecuentes:
- Enfermedades vinculadas con el sistema respiratorio.
- Deshidratación constante. La persona tiene necesidad de beber agua en intervalos continuos.
- Padecimientos cardíacos.
- Fibrosis pulmonar.
- Hipoxemia.
- Procesos irregulares regidos por la médula ósea.
- Enfermedades renales.
- Consumo inusitado de fármacos con el propósito de aumentar los niveles. La automedicación es grave si antes no consultó con un especialista para la aprobación de su ingesta.
Para saber cuál es la raíz que ha desencadenado este desorden en los glóbulos rojos, es pertinente realizar una anamnesis o contar con la segunda opinión de otro galeno distinto al de cabecera o médico de confianza. Si se trata de una patología, entonces el tratamiento será prolongado. De lo contrario, será una medida temporal.
Síntomas de los hematíes altos
A ciencia cierta, los síntomas a describir a continuación no son un indicio fuerte que los pacientes tengan hematíes altos. Por esta razón, siempre es crucial acudir al médico para aceptar o descartar el número desorbitado de estas partículas en la sangre. Además, con la identificación plena de una enfermedad asociada para tratar inmediatamente.
- Dolores de cabeza continuos.
- Mareos.
- Aturdimiento.
- Sangrado por la nariz y oídos con frecuencia.
Enfermedades asociadas
Tal y como ha sido indicado en este texto, la policitemia vera es la enfermedad clásica producida por el aumento descontrolado de los glóbulos rojos, en compañía de los blancos y plaquetas.
En este sentido, distingue de la eritrocitosis al tratarse del incremento puramente de los rojos, hasta provocar los síntomas comunes de un malestar general, que un especialista tendrá que estudiar con detenimiento. Es imposible dejar en un segundo plano a la poliglobulia, cuya presencia de glóbulos rojos es elevada en función de cómo desempeña el plasma sanguíneo.
La elevación del hematocrito es un hecho que genera suspicacia en medicina, porque se basa en un todo en cuanto a los procesos en la sangre refiere. Si es eritrocitosis, el hematocrito se mantendrá en el estándar mientras los glóbulos aumentan.
Para entender mejor el hallazgo de una enfermedad, hay que explicar los valores estándar, moderados y altos. Por ejemplo, si la cantidad mínima es de 5.4 millones y máxima de 6, indica que los hombres están en el marco de lo aceptable, pero en mujeres es una cantidad elevada, pero sin preocupaciones. La deshidratación o tabaquismo permite que los valores estén un poco por encima.
De 6 a 8 millones si es un paradigma que un médico debe evaluar con detenimiento. La causa probable es la proliferación de la eritropoyetina por padecimientos cardiacos o pulmonares. Si hay cáncer de riñón, esta cantidad está justificada, porque es realmente difícil disminuirla si existe este daño renal.
Hay que tener mucho cuidado cuando los hematocritos aumentan al igual que estos valores, porque produce taquicardias, infartos y otros síntomas que complican el cuadro clínico de un sujeto hipertenso. Por tal motivo, es trascendental realizar un chequeo de hematocritos para que la actividad cardiovascular permanezca lo más estable posible.
Ahora bien, si la cifra es mayor a los 8 millones en adelante, la preocupación es sostenible, el estado de salud se agravará en las próximas horas y los síntomas descritos más arriba serán frecuentes hasta no revertir la situación. Lo más escandaloso del asunto radica si el número supera los 10 millones, porque el hematocrito estará disparado en sus niveles, hasta desmejorar a la víctima.
Tratamiento
Hay dos vías para bajar el índice de los hematíes, por el método realizado desde casa o buscar algunos fármacos (siempre y cuando estén bajo supervisión médica). A continuación, algunas alternativas para subsanar los males producidos por los glóbulos rojos en exceso:
- Tomar una taza de té cada vez que el sujeto ingiera algún alimento. En total serán 3 tazas por día, más que suficiente para reducir la hematíes hasta los 5.5 millones, lo requerido para que el cuerpo permanezca saludable.
- Comer dientes de ajo en su estado puro. Para muchos, el sabor del ajo en estado primario podría causar incomodidad, pero gracias a sus propiedades anticoagulantes es inmediato el efecto para bajar los hematíes a su normalidad. Los médicos naturistas recomiendan este producto para combatir de lleno la policitemia vera.
- Comer pimienta extraída de la cayena, porque no sólo reduce los hematíes, sino que fomenta la buena circulación del torrente sanguíneo.
- Si no es suficiente con los remedios caseros, también es probable ubicar en todas las farmacias del mundo una caja con vitamina B9, conocida como ácido fólico. Este componente está presente en los panes, frutos secos y algunas legumbres.
- Vitamina B12 que está colmada en muchos alimentos ingeridos en la vida cotidiana, como carnes rojas y leche.